La Hiperplasia benigna de próstata es el trastorno más común de la glándula prostática y el diagnóstico más común de los urólogos para los hombres de entre 45 a 74 años de edad. Más de la mitad de los hombres de 60 años y un 90% de los de 70 y 80 presentan alguno de los síntomas de la Hiperplasia prostática benigna. A todos los hombres, con el paso de los años, les crece la próstata que es la glándula que forma parte del sistema reproductivo masculino, pero sólo en algunos se puede convertir en una gran molestia. Este agrandamiento de la próstata se denomina Hiperplasia prostática benigna y el robot da Vinci es una de las mejores opciones para tratarla.
No es un cáncer y no aumenta el riesgo de cáncer de próstata
Una próstata normal no obstruye el flujo de la orina desde la vejiga. El agrandamiento de la próstata ejerce presión sobre la vejiga y la uretra y obstruye el flujo de la orina. Si se la deja sin tratar, la Hiperplasia prostática benigna podría derivar en infecciones del tracto urinario, daño en la vejiga o en los riñones o incontinencia.
SÍNTOMAS DE LA HIPERPLASIA BENIGNA DE PRÓSTATA
Los síntomas más comunes pueden ser:
Puede llegar a producir síntomas más graves como son:
Los tratamientos para la próstata agrandada son múltiples y dependen de los síntomas del paciente, de su edad y del tamaño de su próstata. Por lo general, los tratamientos se dividen en dos modalidades: el tratamiento farmacológico y la cirugía.
El tratamiento farmacológico suele ser efectivo y constituye el primer escalón, aunque pueden tener efectos secundarios como son la eyaculación retrógrada (el semen, en lugar de expulsar hacia fuera, se expulsa a la vejiga para luego ser orinado); algunos fármacos pueden producir disminución del deseo sexual y otros, sequedad de boca. Este tratamiento farmacológico se indica cuando la obstrucción en la vía urinaria es leve o moderada.
En aquellos casos en que la próstata es muy grande y los pacientes tienen importantes síntomas y no se obtiene mejora con los medicamentos, el Urólogo puede recomendar la cirugía robótica con el Robot da Vinci. Esta cirugía con el Robot da Vinci, miniaturiza los movimientos naturales del cirujano y le permite una mayor visión y precisión.
El Robot da Vinci ha supuesto una auténtica revolución en la cirugía y se utiliza en diferentes especialidades, siendo su uso frecuente para intervenciones de la próstata ya que por su ubicación profunda y su anatomía compleja es de difícil acceso a la labor de un cirujano y el sistema robótico con el Robot da Vinci ayuda a alcanza la próstata e intervenir de forma muy precisa y con una mejor y más rápida recuperación.
La incisión necesaria cuando se practica una extracción de la próstata a través de cirugía abierta es aproximadamente de entre 8 y 12 centímetros, con la necesidad de una apertura del plano muscular y de todas las estructuras de la pared abdominal. En cambio, el acceso para introducir los brazos robóticos del Robot da Vinci requiere pequeñas incisiones, de entre 5 a 8 milímetros (cuatro o cinco incisiones), que no lesionan la pared abdominal del paciente.
El Robot da Vinci ha de ser guiado por un experto y reputado urólogo como el Dr. Andrés Rodríguez Alonso.
Ante cualquier duda consulte siempre con su Urólogo