La vasectomía es una cirugía menor en la que se cortan o bloquean los conductos deferentes, que son los tubos que transportan los espermatozoides desde los testículos al conducto eyaculador. Al bloquear estos conductos, se evita que los espermatozoides lleguen a las vesículas seminales, lo que impide la fecundación.
Es un procedimiento rápido, con bajo riesgo de complicaciones y muy eficaz como método anticonceptivo.
Realidad: La vasectomía no afecta en absoluto la virilidad, el deseo sexual, ni la capacidad para tener relaciones sexuales placenteras. Todos los procesos hormonales y la producción de testosterona siguen funcionando con normalidad, ya que el procedimiento no altera los testículos ni las glándulas responsables de la producción de hormonas sexuales. Los hombres que se han sometido a una vasectomía continúan teniendo erecciones y orgasmos sin ningún cambio en el placer o el rendimiento sexual.
Realidad: La vasectomía no afecta la cantidad ni el aspecto del semen. Los espermatozoides representan menos del 5% del volumen total del semen, por lo que el cambio es imperceptible. La única diferencia es que el semen ya no contiene espermatozoides, pero el volumen y la consistencia son prácticamente los mismos, lo único que cambia es la coloración.
Realidad: Aunque la vasectomía debe considerarse un método anticonceptivo permanente, existen técnicas para revertir el procedimiento. La reversión de la vasectomía implica volver a unir los conductos deferentes (vaso-vasostomía), permitiendo nuevamente el paso de los espermatozoides. Es cierto que este proceso puede no ser efectivo en todos los casos, y su éxito disminuye con el tiempo transcurrido desde la vasectomía. Por eso, se recomienda optar por la vasectomía sólo si se está seguro de no querer tener hijos en el futuro.
Realidad: La vasectomía es un procedimiento sencillo, que se realiza en el quirófano, con anestesia local y no requiere ingreso hospitalario. Su duración suele ser de 30 minutos. La mayoría de los hombres experimentan molestias leves o moderadas durante los primeros días, que pueden controlarse fácilmente con analgésicos, antiinflamatorios y aplicando hielo en la zona. En cuanto al tiempo de recuperación, la mayoría puede retomar sus actividades cotidianas en 2-3 días y las relaciones sexuales aproximadamente en dos semanas, siguiendo las recomendaciones del médico.
Realidad: Aunque la vasectomía es muy efectiva, no es inmediata. Se recomienda continuar utilizando otro método anticonceptivo, hasta que se realice una cuantificación del número de espermatozoides en el eyaculado (espermiograma), que tiene que confirmar la ausencia de espermatozoides. Esto se debe a que pueden quedar algunos espermatozoides en las vesículas seminales después del procedimiento, los cuales necesitan tiempo para ser eliminados completamente.
Realidad: Numerosos estudios han demostrado que no existe una relación entre la vasectomía y un mayor riesgo de cáncer de próstata o enfermedades cardiovasculares. Es un procedimiento seguro, que no afecta la salud general, ni aumenta el riesgo de estas enfermedades. La vasectomía se limita a bloquear el paso de los espermatozoides y no interfiere en el sistema endocrino ni en otras funciones corporales.
Si estás considerando la vasectomía, es fundamental hablar con un urólogo para resolver todas las dudas y preocupaciones. El Dr. Rodríguez puede explicarte en detalle el procedimiento, sus beneficios y sus posibles efectos secundarios, así como ayudarte a decidir si es la opción adecuada para ti. La consulta es una oportunidad para obtener información personalizada y para entender los cuidados necesarios tras el procedimiento.
Si te interesa saber más, lee el siguiente artículo del blog del Dr. Rodríguez: https://urologiarodriguez.com/blog/vasovasostomia-se-puede-volver-a-ser-fertil-despues-de-la-vasectomia
Con el Dr. Rodríguez Alonso, urólogo en Coruña y Ferrol podrás resolver todas tus inquietudes sobre la vasectomía en un entorno de confianza y profesionalidad.
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